Comer 12 uvas en año nuevo: ¿de dónde viene?

Nochevieja, la última noche del año, después de una suculenta cena en familia la gente se prepara para tomar las 12 uvas. Una por cada campanada que acaban dando lugar al año nuevo, pero… ¿cómo surge esta tradición tan popular?

Esta tradición de comer 12 uvas para celebrar el año nuevo tiene sus raíces en nuestro país, aunque también es popular en otros países de habla hispana como México, Argentina, Chile y Venezuela. Al parecer, esta costumbre surgió como una manera de aprovechar los excedentes de producción de uvas en la región de Alicante.

A mediados del siglo XIX, los productores de uvas de esta región comenzaron a promocionar la costumbre de comer 12 uvas al son de las campanadas de fin de año como una forma de aumentar las ventas de uvas durante la época navideña. Con el tiempo, esta tradición se extendió por todo el país y se convirtió en una costumbre muy popular, tanto que se sigue haciendo cada año.

Según la creencia popular, comer 12 uvas durante las campanadas de fin de año traerá buena suerte y prosperidad durante el nuevo año. Algunas personas incluso atribuyen propiedades mágicas a las uvas y creen que pueden ayudar a alejar el mal de ojo y proteger contra el mal.

Existen otras tradiciones o creencias como la de llevar ropa interior roja durante la noche del 31 de diciembre. Aunque esta costumbre es principalmente una tradición popular, se desconoce el origen de la misma. Muchas personas siguen creyendo que llevar ropa interior roja durante el fin de año puede atraer la buena suerte y la prosperidad durante el nuevo año.

En definitiva, la tradición de comer 12 uvas durante las campanadas de fin de año sigue siendo muy popular en España y en muchos otros países de habla hispana. Aunque la costumbre puede variar ligeramente de un lugar a otro, en general consiste en comer una uva por cada campanada que suena a medianoche, deseando algo bueno para cada mes del nuevo año.